Cien carretillas cargadas de escombros llegan a diario a la única estación de transferencia autorizada para este tipo de residuos de la ciudad, ubicada en la Carrera 50 con Avenida Simón Bolívar.
La escombrera, que funciona desde hace quince años, es el lugar donde cerca de 150 carretilleros depositan grandes cantidades de ladrillos, cemento, madera, metal y hasta tierra capote.
Aunque este lugar sirve para que los escombros que produce la ciudad no terminen depositados en las calles, su presencia ha incidido en el deterioro del canal sur, colector de aguas lluvias que desemboca en el río Cauca.
A la altura de la escombrera viajaban ayer sobre el canal dos poltronas y varias bolsas de basura, mientras bajo el puente vehicular se percibe la presencia de consumidores de alucinógenos y la quema de residuos sólidos.
Damaris Cuartas, habitante del sector residencial de Cañaverales, vecino de la escombrera, manifestó su inconformidad con la mala imagen que brinda este lugar al sector.
“Por aquí es muy frecuente la presencia de carretilleros. Y no tengo nada en contra, pero es que eso parece un basurero que crece cada día más y más”, manifestó.
Ante este panorama, el Dagma anunció la semana pasada el inicio de las labores de limpieza y cierre definitivo de la escombrera.
Ayer, El País visitó el lugar y encontró en las labores de limpieza y separado de residuos a una docena de trabajadores.
“Pero ellos vinieron y trabajaron hasta el medio día, organizaron algunos escombros cerca del canal y se fueron”, explicó Gloria Hidalgo, presidenta del Sindicato de Carretilleros de Cali.
La líder del sindicato señaló que, según el decreto 0291 del 17 de mayo del 2005, en Cali deben existir sitios de transferencia de escombros para los vehículos de tracción animal y volquetas.
Pero “la Administración no ha cumplido con la especificación de este sitio y las entidades encargadas no trabajan de la mano para dar solución a la situación de esta escombrera”, puntualizó.
Los carretilleros manifestaron que el Dagma no ha socializado con ellos la intervención del lugar y tampoco ha brindado información sobre un espacio de transferencia legal para estos residuos.
Al respecto, Andrés Gómez, coordinador del grupo de residuos sólidos del Dagma, explicó que la entidad planea la construcción de un parque en este predio y la adecuación de dos sitios, uno al noroiente y otro al suroriente de Cali, que sirvan como estaciones de transferencia de escombros.
“Este proceso se adelantaría a lo largo de ocho meses y requiere de una inversión cercana a los $300 millones”, señaló.
Gómez afirmó que la construcción del parque va de la mano con una intervención paisajística en el sector y además explicó que por ahora “dejaremos un lugar que no ocupará ni el 10% del área de la escombrera, donde los carretilleros podrán descargar los residuos en volquetas, para así adelantar en los operativos”.

Dato clave
Tres millones de toneladas de escombros se proyecta que generará Cali en el trascurso del 2011.

El País (Colombia) 30-03-11