Argentina | Corrientes | 30-11-2017

La provincia adhirió a la ley nacional. Se promueve la reducción de la producción de basura, el reciclado y la concientización.

En Corrientes, la basura es un problema de difícil solución. En la ciudad se generan más de 350 toneladas diarias y más del 70 por ciento corresponde a residuos orgánicos. A pesar de la implementación de algunas medidas para concientizar a la comunidad en el manejo responsable de residuos, todavía se replican los minibasurales en diversos barrios de la ciudad. En ese sentido, la Cámara de Diputados aprobó la adhesión de la Provincia a la ley nacional 25.916 de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental para Gestión Integral de Residuos Domiciliarios. Con esto, la Provincia incorpora el principio de reducción progresiva en la generación y/o producción de basura haciendo énfasis en el principio de que ?los residuos no son basura, son recursos para gestionar?, como principio fundamental para la gestión de los residuos sólidos urbanos en su territorio. Esto se logrará por medio de la adopción de un conjunto de medidas orientadas a la reducción en la generación de residuos, la separación selectiva, la recuperación y el reciclado. Para ello, cada municipalidad establecerá un cronograma de reducción progresiva de la cantidad de residuos que se destinen a disposición final, basados en un enfoque regional y de planeamiento estratégico, con establecimiento de prioridades, metas, y la implementación de mecanismos que garanticen su costo-efectividad y sostenibilidad en el tiempo. Además, se promoverá la activa participación de la comunidad en todas las etapas de la gestión integral de los residuos sólidos urbanos, especialmente en la disposición inicial y en la valorización de la basura, promoviendo la conformación de cooperativas y emprendimientos para la comercialización y/o reciclado con valor como insumos de nuevos procesos industriales. Con esta ley, se promueve la reducción del volumen y la cantidad total de residuos que se producen, disminuir los riesgos para la salud pública y el ambiente mediante la utilización de metodologías y tecnologías evaluadas y calificadas aptas para el tratamiento y disposición final de los mismos. Incorporar al circuito formal de la gestión de los residuos sólidos urbanos a los recuperadores informales, promoviendo su organización y seguridad sanitaria en el manejo de los residuos. También, informar a los ciudadanos sobre la acción pública en materia de gestión de los residuos, promoviendo su participación en el desarrollo de las acciones previstas y promover la concientización de la población.

FUENTE:
Diario Norte ( Argentina )