La separación de residuos en origen, es decir por la acción de los vecinos en sus domicilios, viene dando resultados positivos. Los jueves, como ayer, sólo se recolectan desechos secos y semana a semana se nota que la comunidad responde a este programa que puso en práctica en todo General Pico hace muy poco tiempo.

El director general de Servicios Públicos de la Municipalidad, Rubén Recarte, señaló: “Estamos convencidos que con el tiempo se convertirá en una práctica exitosa, la gente va tomando conciencia y responde en consecuencia. Hay pruebas concretas que demuestran que el camino que se ha iniciado es el correcto, se refleja en la planta de reciclado”.

“Se ha mejorado considerablemente la separación de residuos en el RRU, ha aumentado el acopio de vidrio, papel, plástico, etc. Eso es producto de la colaboración de los vecinos. Antes para tener una ganancia mensual de 3000 pesos de vidrio, necesitaban dos meses de recolección; ahora en 20 días lograron un resultado de 8000 pesos. Esto es por demás demostrativo, para armar los grandes fardos de papel prácticamente tenían que esperar 60 días y ahora los hacen en 15”, completó.

El funcionario reconoció que existen falencias, pero que se trabaja sobre ellas para hacer cada día más efectivo el sistema: “Obviamente que tenemos que perfeccionar el sistema y nos va a llevar tiempo, una herramienta importante es la difusión, porque de esa manera la gente va a tomando conciencia. No sólo el impacto es positivo en el aumento del acopio de los elementos que hemos citado, sino que también lo es en la calidad del trabajo. Antes probablemente llegaba la misma cantidad de residuos secos, pero al venir con el otro tipo de deshechos, era muy poco lo que se podía rescatar y para hacerlo la gente de la planta RRU tenía una tarea bastante desagradable. Al frente de este programa está Pablo Lobos y en verdad ha hecho un trabajo muy bueno. Reconocemos que hay muchos errores, pero todos son corregibles. Hablo de los que podemos cometer nosotros, como en los que incurren todavía algunos vecinos. Tenemos casos donde sacan las bolsas celestes pero abajo le ponen yuyos y arriba plástico o cartón. De todas maneras, insisto, la gente está respondiendo muy bien”.

Respecto de inconvenientes para tener acceso a las bolsas celestes, Rubén Recarte dijo que “oportunamente hicimos convenio con tres supermercados de la ciudad para que las entregaran pero no siempre lo hacen, de igual manera la gente colabora identificando bolsas que sacan con residuos secos”.

Sobre este tema en particular hay que recordar que hace un tiempo atrás el subdirector de Residuos Sólidos, Pablo Lobos, admitió que “ideal sería eliminar las bolsas pero estamos estudiando como hacerlo, pasa que algunas medidas que pueden considerarse innovadoras, deben ir acompañadas de cambios culturales y de hábitos”.

La planta de transferencia

Otro dato complementario en el aporte de los vecinos a mantener la ciudad más limpia tiene que ver con afluencia a la planta de transferencia de residuos, ubicada en Avenida Circunvalación y calle 44, al menos así lo destacó a través de sus conceptos el director general de Servicios Públicos: “Realmente es sorprendente la respuesta de la gente, tenemos estadísticas que indican cómo aumenta el ingreso de vehículos al sector para depositar residuos en los diferentes contenedores, los cuales están perfectamente identificados para que se sepa en dónde hay que tirar cada clase de residuos. Esta práctica favorece a la limpieza de la ciudad, hemos logrado desactivar la gran mayoría de los basureros que se formaban en distintos barrios, aunque es cierto que todavía tenemos algunos inconvenientes. Aquí la misión es concientizar a la gente para que clasifique los residuos y así los pueda depositar en los correspondientes contenedores”

Asimismo destacó: “Estamos viendo que esa planta nos está quedando chica, por tal motivo hay que ir pensando en sector de la ciudad para sumar una más. Habrá que ir trabajando de a poco, esto obliga a un desembolso económico y en la actualidad en ese aspecto todo el mundo conoce cuál es la situación de la Municipalidad”.

Durante un largo tiempo se convirtió casi en una práctica habitual tirar basura en cualquier lugar de la ciudad, en algunos barrios había lugares críticos que repetidamente obligaban a tareas extras de limpieza por parte de la Municipalidad. Distintas acciones, entre ellas la planta de transferencia, han logrado combatir los famosos ‘basureros artificiales’: “Es cierto que han desaparecido varios de esos focos, igual tenemos una lucha constante y los inspectores tratan de identificar a aquellos que arrojan basura en lugares prohibidos para multarlos, no es fácil. Hay un lugar clave donde dos por tres encontramos con acumulación de residuos, es atrás del cementerio municipal. Quiero destacar la solidaridad del vecino, porque son muchos los llamados que recibimos alertando de que están arrojando basura en lugares que no corresponde y hasta nos informan los números de patentes de los vehículos que participan de la infracción”.

FUENTE:
La Reforma (Argentina) 08-02-13