El nosocomio Francisco López Lima de General Roca es uno de los tres hospitales argentinos que han sido seleccionados por las Naciones Unidas para participar del proyecto “Demostración y Promoción de las Mejores Técnicas y Prácticas para la reducción de desechos generados por la atención de la salud a fin de prevenir emisiones de dioxinas y mercurios al medioambiente”.
El proyecto, que tendrá una duración de tres años, forma parte del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y se aplicará en siete países, evaluando la efectividad de las tecnologías de tratamiento de residuos sanitarios que no involucren la incineración, prácticas de gestión de residuos y otras técnicas para evitar la liberación de dioxinas y mercurio en el ambiente.
Además del nosocomio de General Roca, fueron seleccionados el de Reconquista (Santa Fe) y el Hospital de Pediatría Profesor Doctor Juan Pablo Garrahan.
El trabajo demandará la inclusión en el mismo y se realizará en conjunto con los municipios, siendo el máximo objetivo el de “la protección de la salud pública y el ambiente global de los impactos de la liberación de dioxinas y mercurio” a través de la incineración de residuos sanitarios.
En el caso de las dioxinas, son liberadas en las quemas de PBC, producto contenido en los elementos descartables de uso médico.
El mercurio, en tanto, es un elemento erradicado de los hospitales rionegrinos en consonancia con una campaña de la Organización Mundial de la Salud, lanzada en 2008 para reemplazar termómetros y tensiómetros que poseen este metal pesado por otros de funcionamiento digital, y la resolución 139/2009 del Ministerio de Salud de la Nación que se orienta en el mismo sentido.