Los residentes de los diferentes barrios de la ciudad de Salta se siguen comunicando a la Línea Directa de El Tribuno (4246246) para hacer oír sus reclamos.
En este caso se trata de los vecinos de la calle Ayacucho al 150, donde existe un terreno que se transformó, desde hace algunos años, en un baldío lleno de yuyos, residuos y escombros y que sirve de morada a toda clase de insectos y alimañas.

Angustiada
“La gente utiliza este espacio para hacer sus necesidades. Los indigentes duermen aquí. Está lleno de ratas y cucarachas. Es una inmundicia. Todos los días coloco veneno para ratas. Las ramas obstruyen las canaletas y, cuando llueve, se me inunda la casa. Elevamos varias notas a las autoridades, pero no logramos que nos den una respuesta”, manifestó Juana Mimesí, una vecina que reside al lado del baldío.
“Nos advierten sobre prevención por el dengue y otras enfermedades, pero el lugar es un depósito de restos escatológicos, un foco infeccioso, porque cualquiera lo utiliza como baño y nadie nos da una solución”, añadió otra vecina llamada Rosario, en diálogo con este medio.
Los vecinos comentaron que el terreno en cuestión pertenecería a una señora de apellido Gallo, que vive en San Pedro de Jujuy.
Mariana Abdo, otra vecina, expresó a El Tribuno

: “Este terreno es un peligro. Le pedimos a la Municipalidad que, por favor, le exigiera a los dueños que desmalecen el lugar y lo cierren. Nosotros pagamos impuestos por zona 1 y no merecemos padecer por esto”.
Por otra parte, los habitantes de la zona se mostraron muy molestos con las personas que arrojan desperdicios allí.

Contra la basura
Andrea, una comerciante de la zona, comentó al respecto: “Todo el tiempo se puede observar que salen personas del interior del baldío. Arrojan gran cantidad de basura. Estamos con temor porque de noche es muy peligroso y ya han asaltado a varios vecinos”.
El lugar en cuestión tiene malezas de tres metros de altura. “Los conductores y transeúntes hacen sus necesidades en medio de yuyales, pedimos el desmalezado urgente”, sostuvo Carlos Maidana, otro vecino

El Tribuno (Argentina) 05-04-10