Argentina | Mendoza | 27-11-2013

Un hombre va caminando por el centro y tira el papel del alfajor en la calzada. Una mujer que terminó su gaseosa deja caer el envase en una zanja.

Pequeños actos cotidianos que se van sumando hasta llegar a las 150 toneladas de residuos, cantidad total que -se estima- arrojan los mendocinos en cauces y acequias y que a pesar de la limpieza periódica de municipios y otros entes, provocan el taponamiento generalizado de entre el 20% y el 30% del sistema de desagüe de la zona urbana.

Si bien es una situación que para muchos pasa inadvertida, cuando llueve copiosamente como ocurrió el sábado, afecta a gran cantidad de mendocinos, en este caso vecinos de Guaymallén y Las Heras.

«Nosotros tenemos todo el sistema urbano entramado por acequias lo que tiene una gran ventaja tanto para riego como para evacuación de lluvias», comenzó a explicar Marcelo Toledo, director de Hidráulica y continuó: «El problema es que cuando está tapado con basura este desagüe no funciona y a algunas personas se les comienza a inundar la vivienda».

El funcionario aseguró que entre un 20% y el 30% del sistema de toda la zona urbana está taponado. «Entonces el agua que debería estar en una acequia corre por la calle o la vereda», remarcó a la vez que ejemplificó que un canal que tiene 80 cm de profundidad por 40 cm de ancho (medida aproximada de las acequias locales) se tapa en un 90% con sólo cuatro botellas de plástico, más una bolsa de residuos y algunas ramas.

Toledo diferenció los desagües pluviales, que son las acequias, de los desagües aluvionales como los zanjones Frías, Ciruelos, Sosa y canal Cacique Guaymallén, entre otros, de los que ellos se ocupan.

«Nosotros hacemos entre dos y cinco limpiezas generales anuales, pero es impresionante cómo la gente sigue arrojando desechos», destacó e hizo hincapié en la necesidad de la concientización.

Trabajo permanente

«Si no tuviéramos una atención permanente estaríamos tapados en basura», apuntó Roque Casas, jefe de Conservación del Departamento General de Irrigación, con respecto al trabajo de limpieza de cauces que realizan periódicamente.

En lo que va del año ya han retirado 380.000 metros cúbicos entre residuos sólidos y material de embanque (sedimento, suelo, cañas) de estos sitios, 11 metros cúbicos más que el año pasado.

«Hay que reconocer que en algunos lugares ha disminuido, pero en otros ha aumentado», señaló el funcionario del ente autárquico. Para él la tormenta del sábado pasado complicó a muchos mendocinos porque cayó mucha agua en poco tiempo lo que arrastró todo tipo de basura a los cauces.

Esto se agravó, según su perspectiva, por la gran cantidad de calles impermeabilizadas en el Gran Mendoza. «Estamos tomando acciones, profundizando más la limpieza y sobre todo trabajando en la educación de los más jóvenes», concluyó.

Los municipios también trabajan constantemente para retirar los desechos que diariamente los vecinos tiran en las calles y en las acequias.

Por ejemplo, en Godoy Cruz, se extraen entre 8 y 10 camiones diarios de 3.000 kilos cada uno, considerando únicamente los residuos tirados en las acequias, calles y embanque sin tener en cuenta la recolección domiciliaria.

«Se hace limpieza permanente, el problema es de cultura de la gente. Parece que les es más fácil tirarlo en la acequia que depositarlo en el lugar correspondiente», expresó Lelio Meli, director de Higiene Urbana del municipio, quien subrayó que lo que más encuentran son botellas PET.

En ese departamento, que recientemente estuvo abocado a la limpieza del Zanjón Maure, no tuvieron inconvenientes con la tormenta del sábado.

Basura mal depositada

Desde la Secretaría de Ambiente, José Pozzoli dio a conocer estimaciones que reconocen que entre un 15% y el 20% de los desechos que se genera en la provincia va a parar a los lugares y que el 10% terminan en canales y acequias. «Calculamos que entre 150 y 180 toneladas por día van a parar a las cauces de riego, aluvionales y acequias», detalló el coordinador de Residuos Sólidos Urbanos de Mendoza.

«Es un problema de educación, ya que todavía hay gente que barre la vereda hacia las acequias, tira directamente la basura a las calles o canales», coincidió quien recomendó poner los residuos donde corresponde, no tirar la mugre a la acequia y dejar las bolsas en altura, ya que muchas veces los perros callejeros las rompen para comer y los restos llegan inevitablemente a los cauces.

FUENTE:
Los Andes ( Argentina )Carla Romanello – cromanello@losandes.com.ar