El municipio prohibirá el vertido de los aceites comestibles quemados en el suelo, en la red cloacal o en los sumideros pluviales si prospera un proyecto que presentó el bloque de la UCR para promover la reutilización de ese residuo.
Los concejales Claudio Otano y Laura Alves recordaron que de acuerdo a un estudio realizado hace ya un año con apoyo técnico del INTI, Bariloche produce no menos de 50 mil litros anuales de aceite comestible usado, que por lo general termina en las cloacas "o es volcado ilegalmente en el vertedero o en descampados".
Esa cantidad podría ser bastante mayor, ya que el relevamiento sólo comprendió a 56 establecimientos céntricos, a los que faltarían agregar los hoteles y restaurantes del Oeste de la ciudad y del cerro Catedral, además de las rotiserías de los barrios periféricos.
Otano dijo que "en un futuro cercano" el aceite usado podría emplearse para producir biodiésel, con la posibilidad de que ese combustible contribuya a "abaratar los costos que insumen las usinas de reserva fría de la CEB o los vehículos municipales".
Por otra parte, el proyecto de ordenanza propone establecer "un marco de gestión integral" para el aceite vegetal que descartan los comercios gastronómicos de la ciudad.
Además, impone la prohibición de su vertido descontrolado en el suelo o en cualquier desagüe y señala que el aceite deberá ser "recolectado y tratado fuera de los establecimientos generadores, por transportistas y operadores debidamente registrados".
Diario Río Negro (Argentina) 09-03-10