Ya sea por una diferencia en la interpretación, por cuestiones de aprovechamiento político o por una falla en la comunicación interna, la cuestión del servicio de recolección de residuos sigue siendo un motivo de tormenta en el municipio de Rivadavia.
Allí, la intendenta Ana María López de Herrera, volvió a explicar ayer que va a licitar el servicio “que ya está privatizado desde antes, buscando una mayor eficiencia y para hacer economía”, pero su retórica no es escuchada o, ya sea intencionalmente o no, no escuchada puertas adentro de la municipalidad.
Es que la postura de la intendenta es clara cuando explica que “el servicio está de hecho privatizado porque la Municipalidad no tiene camiones para hacer la recolección ni para regar y tiene que alquilar esos camiones con sus choferes para poder cumplir con el trabajo”.
La jefa municipal sostiene que “si licitamos el alquiler de camiones con chofer, vamos a tener un ahorro porque no es lo mismo que con tratarlos uno por uno como ahora, a contratar una empresa por varias unidades”.
Además, indicó que “por otro lado, vamos a poder hacer un pliego de condiciones que establezca los servicios a la medida de lo que necesita el departamento y vamos a poder exigir el cumplimiento, en vez de tener que hacer esfuerzos adicionales como ahora, porque con los camiones contratados no podemos llegar a todos los rincones del departamento como debemos hacerlo”.
La intendenta explicó además que “una de las condiciones que vamos a poner en el pliego de licitación, es que la empresa que venga, tiene que absorber al personal que está trabajando en la recolección de residuos, de modo que las condiciones de trabajo de esa gente no tiene porque cambiar” y que en caso de que alguien no sea absorbido, “va a ser reubicado en tantas labores que tiene que hacer el municipio”.
Obreros y concejales
Ayer, en la sesión del Concejo Deliberante, cerca de 60 obreros de la recolección de residuos, con sus delegados, fueron recibidos por los concejales para escuchar el planteo del sector del trabajo.
En pocas palabras, algunos de palabras más violentas que otros, plantearon que lo que los trabajadores quieren es “no perder el adicional por insalubridad” que cobran y que representa el 30 por ciento del sueldo, así como la libertad para “hacer changas durante el día”, ya que la recolección de residuos se realiza entre las 10 de la noche y las 3 de la mañana.
Con cierto grado de oportunismo, el concejal Sergio Miodowsky aprovechó para intentar poner en evidencia una supuesta incoherencia del gobierno municipal, que recordó que “apoyó la nacionalización de YPF, pero ahora quiere privatizar los servicios en el departamento”.
La ofensiva del concejal fue contestada por la presidenta del Concejo Deliberante, Adriana Catraro, quien recordó que “la ordenanza que le dio facultades al Departamento Ejecutivo para licitar los servicios, fue aprobada por todos los concejales por unanimidad”, dejando en evidencia la intencionalidad política de Miodowsky.
Como corolario de la jornada, los obreros plantearon a los concejales que se analice la posibilidad de que el municipio adquiera camiones y equipo para hacer la recolección por cuenta propia, en tanto que quedaron en que pedirían una audiencia con la intendenta para realizar el mismo planteo.
FUENTE:
El Zonda (Argentina) 27-06-12